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El Tarot: origen y tradición
El Tarot: origen y tradición. El Tarot pertenece a la tradición occidental y es uno de los sistemas de predicción y adivinación más enigmáticos.
Los orígenes del Tarot se desconocen, es como un misterio que aún en nuestros días somos incapaces de descubrir.
La manera de funcionar del Tarot tampoco lo conocemos, pero es capaz de reflejar nuestro estado mental interior y nuestra situación actual. Es fascinante. Se dice dice que el Tarot está regido por una inteligencia superior que nos guía al escoger las cartas, porque no fallan.
El Tarot consta de 78 cartas divididas en Arcanos Mayores y Arcanos Menores. Son 22 Arcanos Mayores y 56 Arcanos Menores. Todos ellos diferentes, atractivos e intuitivos. Digamos que el Tarot es como una gimnasia de la intuición. Cuanto más practiques el Tarot, mas intuitiva/o te vuelves.
Para comprar una baraja del Tarot no hace falta que sea excesivamente cara, lo que si es importante es que no sea usada y nos sintamos atraídos por ella. Las vibraciones de las personas quedan adheridas a las cartas para siempre y no se pueden limpiar, son a modo de interferencias que no nos dejan trabajar y nos equivocan.
Hay tantas clases de barajas de Tarot que es muy difícil aconsejar una en particular, así que yo os aconsejo acudir a una tienda especializada en barajas y que os enseñen. Si os gusta alguna, si os sentís atraídos especialmente por alguna, esa es vuestra baraja. Se os meterá en la mente y la tendréis que comprar, porque os llamará.
Una vez tengáis vuestra baraja, tenéis que ritualizarla para que sea de verdad vuestra y coja vuestras energías. Sabéis que a través de las manos las energías fluyen de manera continua, así que ponemos sobre la mesa un paño si es posible de seda natural, bueno a mi es el que más me gusta, pero si es de algodón también, sobretodo que sea de fibras naturales. Pues eso, vais abriendo la baraja y sacando las cartas una a una, mirándolas, y con la mente en blanco vais absorbiendo todo lo que os inspire la imagen.
Este primer contacto es esencial. Ya formará parte de vosotros y vosotros de la baraja.
Vais colocando todas las cartas sobre la mesa y cuando ya estén todas ponéis las manos encima, y con respeto y concentración pedís a la fuerza cósmica que os ayude a entender todo lo que el destino tiene guardado y que está por venir.
El Tarot es un ejercicio bueno para la mente. Habría que realizarlo cada día. Muchas personas no se encontrarían tan solas y tan perdidas.
Para saber el poder que tiene el Tarot, basta con probar. Entonces el secreto del Tarot formará ya parte de cada uno de vosotros.
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